%20(1).png){kind=logo}
Aquel día de primavera me encontré una casa del árbol donde vivían muchos mangos.
El chillido del pájaro Loco, avisaba a todos en el árbol, el peligro que corrían los bebés manguitos. Con su gran pico encorvado intentaba acercarse pero los guerreros los protegían, al sonar la trompeta de la victoria, gritaban de alegría por la victoria obtenida.
Por fin Santiago nació, después de las inesperadas visitas del pájaro Loco, esto sin contar las piedras que lanzaban los niños de la vereda, con amor, alegría, unión lo criaron sus padres.
Ha crecido tanto Santiago, que ¡ya es un hombrecito! decidió escoger el basquetbol como su deporte favorito y todos los días en las mañanas se va a entrenar porque dice él “qué quiere ser el mejor”
CopyrightFACOPEC